Lo que esos iluminados del patín no valoran es que quizás hay cosas mejores que el ansia adolescente de pertenecer a un grupo que, como si de un ejército se tratara, te pidiera unos determinados trucos como logros, como medallas para acceder a los galones determinados para ese grupo/ejército clon. Quizás la madurez de un skater reside en vivir lejos de esos patrones de conducta igualitaria y seguir tu propio camino, aprovechando el potencial de una habilidad individual dónde las haya, sin despreciar el verdadero significado de la amistad con quienes te acompañan en tus aventuras sobre ruedas. La madurez a veces se hace esperar, a veces es indeseada y los hay, que pese a sus locuras, parecen haberla tenido siempre.
miércoles, 27 de junio de 2012
MITICISMO: MIKE V AND THE FREEDOM
Mike Vallely es un skater pofundamente respetado por muchísma gente, ignorado por otra y denostado por un sector de personas influenciadas por ese período en que pareció perder la cordura ante el ojo que todo lo juzga.
Lo que esos iluminados del patín no valoran es que quizás hay cosas mejores que el ansia adolescente de pertenecer a un grupo que, como si de un ejército se tratara, te pidiera unos determinados trucos como logros, como medallas para acceder a los galones determinados para ese grupo/ejército clon. Quizás la madurez de un skater reside en vivir lejos de esos patrones de conducta igualitaria y seguir tu propio camino, aprovechando el potencial de una habilidad individual dónde las haya, sin despreciar el verdadero significado de la amistad con quienes te acompañan en tus aventuras sobre ruedas. La madurez a veces se hace esperar, a veces es indeseada y los hay, que pese a sus locuras, parecen haberla tenido siempre.
Lo que esos iluminados del patín no valoran es que quizás hay cosas mejores que el ansia adolescente de pertenecer a un grupo que, como si de un ejército se tratara, te pidiera unos determinados trucos como logros, como medallas para acceder a los galones determinados para ese grupo/ejército clon. Quizás la madurez de un skater reside en vivir lejos de esos patrones de conducta igualitaria y seguir tu propio camino, aprovechando el potencial de una habilidad individual dónde las haya, sin despreciar el verdadero significado de la amistad con quienes te acompañan en tus aventuras sobre ruedas. La madurez a veces se hace esperar, a veces es indeseada y los hay, que pese a sus locuras, parecen haberla tenido siempre.