Personalmente no conozco a estos muchachos, aunque les he saludado un par de veces y, discretamente, he estado en la misma sesión que ellos. Disfruto mucho viendo como patinan , siguiendo su evolución desde la sombra de mi camarote y admiro lo que hacen, más todavía en un país dónde a veces reina un "contexto" de patinadores "atletafílicos" que puede ejercer una presión inclemente hacia todo aquello que supone un acercamiento diferente a la materia. No hay que hacer caso a nadie, hay que seguir adelante. Pero eso lo sabemos todos, a veces por experiencia propia.
Esta pandilla de muchachos resulta ser finalista de una movida del Berrics, página cuyos entresijos escapan a mi conocimiento, pero el video resultante me ha parecido una maravilla. Dale al play si te apetece. Volvamos a navegar.