Dicho esto y gracias a un amigo que tuvo a bien colgar esta parte en el grupo LOBODEMAR del caralibro, descubrí un pedazo de historia del patín que, por lo que sea, olvidé o pasé por alto. No es ningún secreto que disfruto de estos hallazgos como un niño pequeño y mi frikismo se decanta más por estas cosas que por vestirme de seda y seguir siendo una mona. DAN PETERKA...en definitiva....una parte de 1991 avanzadísima a su tiempo y con un estilo que hace temblar, trucos inusitados para la época y una ejecución impecable, limpia como las sábanas de un puticlub caro, un misterio para todos. Misterio el de cómo un tipo así fue capaz de desaparecer, grabar su señal en fuego ardiendo e irse para que nadie sepa o recuerde su nombre. Podéis buscar algo de su biografía en la red, si interesa mucho, si interesa un poco sólo ved esta parte, si no interesa nada, pues a vivir en exclusiva de comer Petit-Suisse, ingerir edulcorantes o películas de Hollywood sin pasar por Bergman o la Nouvelle Vague. Desequilibrar la dieta con demasidas chucherías. No passa res.
