Desde luego que acabar en Portania es la opción fácil y más recurrente en los últimos tiempos, de todas formas, eso no impide que ahí tengamos una sensación de paz y familiaridad que a veces cuesta hallar en otros ámbitos. Hoy, después de un tiempo acumulando polvo, me he llevado la cámara de fotos, simplemente para tener algún entretenimiento extra y a ver si sacábamos alguna cosilla para guardar en este Cuaderno de Bitácora. Nada, un saludo a todos, no mezcléis la ropa blanca con la de color. NO MEZCLÉIS.